Gran Canaria, mucho más que playas y paisajes volcánicos, es célebre por uno de los carnavales más vibrantes y extravagantes de España. Estas fiestas anuales, profundamente arraigadas en la cultura isleña, estallan en color, música y alegría, atrayendo a visitantes de todo el mundo. Para quien busque una experiencia cultural única, celebrar el Carnaval en Gran Canaria es la oportunidad perfecta de sumergirse en una de las tradiciones más vivas del país.
El Carnaval no es solo una sucesión de actos: es la expresión de una rica historia y un patrimonio cultural compartido. La tradición se remonta al siglo XVI —concretamente a 1574— cuando colonos genoveses organizaron un baile de máscaras. Pese a la prohibición de la Inquisición, la fiesta sobrevivió y, en el siglo XIX, se consolidó incorporando influencias de múltiples culturas.
Durante el franquismo, las celebraciones públicas quedaron reprimidas, pero el espíritu carnavalero pervivió en la intimidad. Con la llegada de la democracia, el Carnaval resurgió con más fuerza que nunca y hoy, declarado Fiesta de Interés Turístico Internacional, simboliza la resiliencia y la alegría del pueblo grancanario.
El pulso de la isla
La temporada carnavalera se extiende varias semanas y ofrece actividades para todos los gustos. Comienza con el Pregón, sigue con desfiles de carrozas espectaculares, comparsas, murgas y música en vivo. Uno de los momentos álgidos es la Gala Drag Queen, un espectáculo deslumbrante que refleja la apertura y la creatividad insular y atrae público de todo el planeta.
Tampoco faltan los mogollones —macrofiestas al aire libre que prolongan la música y el baile hasta el amanecer— ni el Entierro de la Sardina, quema simbólica de una gigantesca sardina que marca el fin del Carnaval y el inicio de la Cuaresma.
Participar —aunque sea disfrazándose, bailando en la cabalgata o simplemente dejándose llevar por el ambiente— regala una experiencia inolvidable.
Fiesta todo el año: carnavales distintos en cada rincón
Gran Canaria celebra varios carnavales a lo largo del año, cada uno con personalidad propia.
Las Palmas de Gran Canaria: la capital acoge uno de los más grandes y prestigiosos. El Carnaval de Las Palmas de Gran Canaria destaca por su Gran Cabalgata, la Gala de la Reina y, sobre todo, la Gala Drag Queen. Suele celebrarse entre febrero y marzo, convirtiéndose en escapada invernal ideal para el público americano.

Carnaval de Maspalomas: en el sur, junto a la playa, el Carnaval Internacional de Maspalomas despliega desfiles coloridos, actuaciones callejeras y fiestas en la arena. Muy popular entre visitantes internacionales, se celebra normalmente en marzo y permite combinar Carnaval con relax playero.
Durante estas fechas la isla se llena, por lo que conviene reservar alojamiento y vuelos con antelación. Gran Canaria ofrece desde resorts de lujo hasta hoteles económicos para todos los bolsillos.
Los carnavales grancanarios son una celebración de la vida, la cultura y la comunidad. Para quien desee descubrir nuevas tradiciones y sumergirse en la fiesta, Gran Canaria es el destino perfecto. Desde las calles históricas de Las Palmas hasta las playas soleadas de Maspalomas, el espíritu del Carnaval impregna toda la isla y promete una aventura inolvidable de color, música y alegría.
Cuando reserves tu próximo viaje, no olvides meter el disfraz y los zapatos de baile: el Carnaval de Gran Canaria te recibe con los brazos abiertos.
Acceso a la mayoría de actos del Carnaval de Las Palmas de Gran Canaria es libre y gratuito hasta completar aforo, salvo la preselección Drag, la Gala Drag Queen, la Gala de la Reina y la Final de Murgas.
Para estos eventos se venden entradas en: entradascanarias.com







